Se determinó desde dónde se filtró el texto de la denuncia a Martín Gill
- 14/05/2023 14:51 hs
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Desde las computadoras del Juzgado de Violencia Familiar se pudo acceder al texto de la denuncia en contra del intendente. Se conoce quiénes la vieron.
El primer fin de semana de abril se viralizó el texto de la denuncia que se había presentado contra el intendente, Martín Gill. Su expareja, Lourdes Astudillo, había denunciado hechos de violencia por parte de Gill en la Unidad Judicial de Violencia Familiar y de Género el 18 de marzo de este año.
Sin embargo no fue de ninguna de las dependencias del Ministerio Público Fiscal desde donde se disparó el contenido de la demanda. El acceso a la presentación se produjo en un área del Poder Judicial, más concretamente en el Juzgado de Violencia Familiar, a cargo de Nerina Gamero, donde se tramitan una serie de medidas y desde donde se dictó orden de restricción de acercamiento para Gill y su expareja, Lourdes Astudillo.
Una alta fuente de la Justicia confirmó que “se filtró desde el Juzgado por un error del sistema”. Por esa vulnerabilidad momentánea, quedó a la vista la presentación. Ya fueron identificados todos los empleados, funcionarios y magistrados que ingresaron a verla, aprovechando la falla. La fiscal de Instrucción, Juliana Companys, recibió ese listado.
Para acceder al SAC, el sistema en el que se cargan todos los expedientes, es necesaria una clave. Eso permitió detectar quiénes entraron específicamente a esta causa. Desde el hackeo que sufrió el Poder Judicial a mediados del año pasado se restringieron al máximo las claves y las posibilidades de tráfico interno.
Hasta ese momento, un empleado podía ingresar a la base de datos de otros juzgados o fiscalías. Hoy esa posibilidad no existe. “Es como cuando existía el expediente papel”, comentó a este medio una alta fuente judicial. “En aquella época para ver una causa había que pedirla en el tribunal correspondiente; ahora es lo mismo, porque la habilitación no es indiscriminada”, concluyó. Sin embargo, en este caso admiten una “falla” que fue subsanada inmediatamente.
Sobre la filtración de Villa María, el TSJ decidió remitir las conclusiones obtenidas al Tribunal de Ética para que tome intervención. Según la imagen que este medio pudo ver, lo que luego se viralizó es un documento escaneado. Sin embargo desde los tribunales aclararon: “Se identificó a quienes la vieron, no a quién la difundió”. Por las características, el caso es reservado.
En sede penal, hasta que no se realice la indagatoria de Gill, el expediente continúa siendo secreto aún para la denunciante quien ya fue admitida como querellante, con asistencia letrada de Florencia Vottero. Y el trámite en el Fuero de Familia también tiene carácter secreto por el tipo de situaciones que se analizan.