Día Mundial del Cáncer de Riñón: ¿Cómo podemos identificarlo?

Sergio Orellana, Jefe del servicio de Urología del Instituto Médico de Río Cuarto, comentó a DE UNA sobre el cáncer del riñón. El Día Mundial se conmemora el tercer jueves de junio y en Argentina se encuentra en el puesto 5 de diagnóstico frecuente. La enfermedad afecta el proceso de filtrado de la sangre, por parte de este órgano, para producir la orina. Mayormente, afecta a personas que rondan entre los 60 y 75 sanos, aunque en los últimos años se vio un aumento en jóvenes.

Más de 430.000 personas son diagnosticadas con cáncer de riñón y casi 180.000 mueren a causa de esta enfermedad, cada año, en todo el planeta, asegura el Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (CIIC, por sus siglas en inglés), agencia especializada de la Organización Mundial de la Salud. Esta patología se caracteriza por el crecimiento anormal de células en el tejido renal, formando una masa llamada tumor

En general, en los primeros estadios de la enfermedad es asintomática. Actúan como “nódulos” que se forman en la zona. “La mayoría que descubrimos es por casualidad” y hace referencia a que los chequeos preventivos por otra razón muchas veces derivan en este resultado.

Recomienda a las personas controles para así, diagnosticar la enfermedad en estadía temprana y generar un correcto tratamiento. “La mayoría de las veces se diagnostica tempranamente”, explica. En general, si esto ocurre, se llega a buenos resultados y así se disminuye la letalidad de la enfermedad.

Señala que, fundamentalmente aquellas personas que tienen predisposición a tener tumores, como la hipertensión, la obesidad y el estrés, deben estar atentas ante estas patologías. Entre los riesgos, el consumo de tabaco es un factor que duplica las posibilidades.

En caso de haber síntomas, son leves, tales como dolor de espalda y cansancio general sin causa aparente. En caso de estar más avanzado, puede observarse una orina oscura con presencia de sangre. Por esto, es importante el análisis básico de orina, que ayudaría a detectar la presencia de sangre microscópica.

La vida sana con buena alimentación y actividad física contribuyen a prevenir. El control consiste en una ecografía de abdomen, una vez al año. Además, también contribuye a controlar el resto de los órganos.

En la mayoría de los casos, se lleva a un procedimiento quirúrgico, en donde se extrae el tumor o el riñón en su totalidad, en caso de estar avanzado. En complemento y en casos excepcionales, se deriva a la inmunoterapia, que son medicamentos que mejoran las respuestas al tratamiento. “Está muy avanzado científicamente y no es lo mismo que quimioterapia”, aclara.

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