La actividad metalúrgica cayó en marzo casi un 18 por ciento

En el mes de marzo, la actividad de la industria metalúrgica cayó un 17,7 por ciento en la comparación con el mismo mes del año pasado, mientras que también registró una caída con relación a febrero, aunque en este caso de un 2,8 por ciento.

Así lo informó la Asociación de Industriales Metalúrgicos de la República Argentina (ADIMRA), en el informe elaborado por su Departamento de Estudios Económicos.

Con estos datos, el primer trimestre del año también cierra con una caída, registrando una merma del 6,6 por ciento con respecto al mismo período del 2023.

Otro tanto sucedió con el uso de la capacidad instalada de las empresas, que registró una merma de diez puntos porcentuales en su comparación con el primer trimestre del año pasado, siendo la caída más importante de los últimos 8 años, solo comparable con lo acontecido en los 4 meses mas duros de la pandemia.

Los datos generan honda preocupación no solo entre los empresarios, sino también entre los trabajadores del sector, en su mayoría afiliados a la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). 

En la provincia de Córdoba, el descenso estuvo por debajo del promedio general, con un 16,7 por ciento de caída.
Por su parte, Santa Fe fue la más golpeada, encabezando el ranking de descensos en la actividad metalúrgica del mes de marzo, con una baja del 22,1 por ciento.

Sin embargo, el informe de Adimra remarca que las caídas no impactan aún en el nivel de empleo. 

“A pesar de las fuertes contracciones en la actividad verificadas en los últimos meses, aún no se observa una situación de tal magnitud en el nivel de empleo que aportan las empresas del sector. Si comparamos contra el mes previo, el empleo se contrajo -0,5%”, destacan. 

Agregan además que “se observa una relativa estabilidad ya que tras la fuerte recuperación de los puestos de trabajo luego del 2020, el número se mantiene en términos relativamente estable desde mediados del 2022”.

El panorama es poco alentador, especialmente en el caso de Córdoba, por la retracción que sufre también la industria automotriz.

En nuestra provincia, muchas empresas del sector son autopartistas y trabajan en relación directa con las fábricas de automóviles, tractores y maquinaria agrícola.