Dice la vida que dejes las excusas

Dice la vida que dejes de meter excusas y que permitas que todo sea más simple!!!

Date permiso: ¡Tiene que haber otra manera! Mira la vida con otros ojos!

Aunque sea por ratitos hasta que esos ratitos se vuelvan vida... 

Quizás sea momento de empezar a desaprender, podríamos poner en juego la pregunta que lo cambia todo, y si hay otra forma? ¿Y si la que aprendimos ya no es coherente con nuestras experiencias?  ¿Para que seguir insistiendo? 

Aprendimos a hacer y pensar mucho, pero al Ser lo dejamos sentado en el rincón.

Somos jueces, controladores y procrastinadores oficiales. 

Tenemos un master en comparar, etiquetar y ponerle valor a todo, en función de qué? 

Nos acostumbramos y normalizamos vivir con lo que nos hace mal como si fuera cosa del destino, lo que toco, como si no tuviésemos el poder de Crear. 

¡Tenemos poca paciencia y queremos todo ya! Nos cuesta parar, preguntarnos qué es lo que realmente queremos, porque para eso primero tenemos que saber quiénes somos, la gran pregunta sería quién soy? 
Lleva mucho trabajo interior, tiempo, aceptación, entrega y una mente sin juicios. 

Buscamos recetas mágicas que en 5 minutos nos saquen del embrollo que estamos metidos, cuando hace años que lo estamos tejiendo y cedemos nuestra sanación a un otro.

Cuesta asumirnos como adultos responsables y tomar la propia vida.
Hace falta disposición y un deseo genuino del corazón para salir de ahí ¿cuán dispuesto estamos para que esto suceda?
 
Somos eternos niños-adolescentes reclamando y pidiendo coherencia, pero todo empieza por nosotros ¿Somos realmente coherentes en la vida?

Cuando creamos desde el mundo del miedo existen las víctimas y los victimarios, la culpa, la ira, el rencor, la soledad, la separación, entre otras hierbas, incluida la enfermedad y hasta a veces la afirmo ¿De verdad? 

Interesa tener siempre la razón que ser felices y saber reconocer cuando metimos la pata. 

Y ahí vamos mirando sin ver, oyendo sin escuchar, tocando sin tocar, creyendo vivir en un mundo cuasi cruel.

Un día me "incomodaron" , me atreví a cuestionar todo, y me puse a pensar que si realmente alguien creó todo esto seria muy cruel....

Y entonces entendí de la responsabilidad de cada uno por hacer de este un lugar mejor. 

Corbera dice "cuando llegamos a un punto en que no sabemos quiénes somos, ni a dónde vamos, ni qué hacemos aquí, hemos alcanzado el feliz momento en que podemos decidir de nuevo" y ahí estaba. 

Y tomé una decisión.
 
Hoy elijo (porque mañana puedo cambiar).

Vivir desde el Amor, tomando y aferrándome a la vida con todo mi Ser.

Apagar la mente, hacer espacios, sentir y conectar con las sensaciones y emociones. 

Desarmar lo seguro y aventurarme a vivir desde una manera más autentica y con sentido. 

Poner más seguido los pies en la tierra, para sintonizarme con la vida.

Rendirme al sagrado instante en donde de la nada puedo ver emerger el Todo.

Escuchar más al corazón.

Dejar de leer instrucciones de la vida y experimentarla desde mis sentidos. 

Bajar los remos y dejar de revolver las dudas que se hundan para así ver emerger las benditas certezas.

Otorgo la autoridad absoluta de mi caminar al pulso creativo que marca el corazón. 

Voy a confiar en mis procesos, entablar amistad con la calma y cultivar la paciencia. 

Me sumo a atravesar el instante que es lo único seguro que tenemos, sabiendo que todo es perfecto, así como sucede.
Buscar qué es lo le da sentido a la vida.
Agradecer més y quejarme menos. 

Nos merecemos ser más reales, honestos, aceptarnos, mirarnos más a los ojos, abrazarnos, compartirnos, bajar la guardia, amarnos un cachito más, nadie dijo que era fácil.

Hoy elijo sentir con el alma.