Ushuaia disfrutó este viernes por la noche de un espectáculo increíble en el cielo, producto de una fuerte tormenta solar que provocó la aparición de las auroras australes que lo tiñeron de rojo.
Se trata de un fenómeno muy poco común en estas latitudes, que también pudo observarse en la Base Marambio en la Antártida argentina y en diferentes partes del planeta.
La Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA), dependiente del Departamento de Comercio de los Estados Unidos, había anticipado este fenómeno por el arribo a la Tierra de una enorme tormenta solar.
“Este es un evento inusual y potencialmente histórico”, sostuvo Clinton Wallace, director del Centro de Predicción del Clima Espacial de la NOAA.
Las eyecciones de masa coronal explosiones de plasma y campos magnéticos de la corona solar, provocan tormentas geomagnéticas cuando se dirigen a la Tierra.
Estas tormentas geomagnéticas pueden afectar la infraestructura en la órbita cercana a la Tierra y en la superficie, perturbando potencialmente las comunicaciones, la red eléctrica, la navegación, las operaciones de radio y satélites.