El último adiós al cantante se realizó en Mundo Bailable, ubicado en Ingeniero Budge, Lomas de Zamora, donde hoy funciona un templo evangélico.
Con apenas 20 años y en la cúspide de su carrera como músico, Walter Olmos murió el 8 de septiembre de 2002, hace 21 años, en un confuso episodio. El último adiós al cuartetero fue en un multitudinario velatorio que se realizó en una bailanta de Lomas de Zamora que hoy funciona como un templo evangelista.
La noche de su muerte, el artista que nació el 21 de abril de 1982 en Catamarca y que era señalado como el sucesor de Rodrigo, se encontraba junto a los integrantes de su banda en un hotel del barrio porteño de San Cristóbal, esperando para comenzar los shows que debía dar en Quilmes, Berazategui y La Plata. Estaba jugando con una pistola que le habían regalado hacía poco tiempo.
“Tantas veces la gatilló, que bueno… se gastó la bala. Antes de ponérsela en la cabeza, le había gatillado a tres músicos. Estaba en su habitación comiendo pizza antes de salir a trabajar. Jugando con el arma, pum, pum, pum. ‘¡Pará, loco!’, le dijeron. ‘No pasa nada’, respondió. Hasta que se mató”, recordó José Luis Gozalo, quien fuera su representante y quien también había sido mánager del Potro cordobés.
Por su parte, el sonidista Luis López recordó: “Entré a la pieza y me puso el arma en la cara. Escuché un clic y le dije que se dejara de joder porque podía meterle un tiro a alguien. Me quiso calmar, dejó caer una bala y me dijo que no pasaba nada”.
La autopsia determinó que la bala de la pistola Bersa calibre 22 ingresó por la sien derecha y quedó alojada en su cerebro. Olmos quedó tendido sobre la cama. Estaba allí esperando que le pasaran el teléfono para hablar con su hermana. Fue una muerte inmediata.
El multitudinario velatorio de Walter Olmos
El velatorio de Walter Olmos se llevó a cabo al día siguiente de su muerte en el boliche Mundo Bailable, ubicado a 100 metros del Puente La Noria, en la localidad Ingeniero Budge, del partido bonaerense de Lomas de Zamora.
Esa bailanta, donde hoy funciona una sede de la Iglesia Universal del Reino de Dios, era un lugar muy conocido por Olmos, dado que había cantado allí muchas veces durante su breve pero exitosa carrera musical. Es que el dueño del lugar era su representante, José Luis Gozalo.
El último adiós al cuartetero tuvo una gran asistencia. Antes de que comenzara la ceremonia, había dos cuadras de cola para ingresar al lugar. Según puede verse en material de archivo, la gran mayoría de las personas eran adolescentes y jóvenes, que llevaban incluso vinchas, remeras y banderas con la cara del cantante.
Los restos de Walter Olmos llegaron alrededor de las 21.30. La despedida se realizó a cajón abierto y se extendió hasta la 1.10 de la madrugada, cuando el cadáver fue trasladado al Aeroparque Jorge Newbery para ser enviado a Catamarca, su provincia natal donde lo esperaba su familia y sus amigos de la infancia.