Instituto volverá a jugar este domingo en la Bombonera luego de 17 años

El domingo 28 de agosto de 2005 fue la última visita de Instituto a la Bombonera. Tanto tiempo pasó. Aquella jornada en el estadio de Boca estaba Diego Armando Maradona. Esa tarde, en el que el “Xeneize” ganó por 3-0, Martín Palermo hizo un doblete. Al mismo tiempo, River era goleado por Banfield y renunciaba Leonardo Astrada como DT del “Millonario”. José Manuel De la Sota era el gobernador de la provincia de Córdoba, Néstor Kirchner gobernaba el país, y Lula, en Brasil, anunciaba que se quería volver a presentar el próximo año. El mundo estaba asombrado por lo que estaba pasando en New Orleans, Estados Unidos, con el paso arrasador del huracán Katrina. Datos para dimensionar todo lo que pasó en estos 17 años y medio desde aquella vez.

Nadie, en Alta Córdoba, imaginó que pasarían tantos años. En aquel partido el ‘Sargento” Giménez le sacó tarjeta roja al defensor uruguayo Damián Santin, y el elenco que conducía Fernando “Teté” Quiroz jamás logró entrar en partido y sufrió esa derrota contundente. 

Franco Watson, el 10 de Instituto, tenía tan solo 3 años cuando la “Gloria” visitó por última vez la Bombonera. Su papá, Sergio, hacía goles en Juniors.

La “Gloria” formó con Gastón Pezzuti; Franco Sanchirico, Gabriel Lobos, Diego Capria, Santin; Lautaro Trullet, Damián Facciuto, Hugo Barrientos y Lionel Pilipauskas; Nicolás Castro; y Sebastián Arrieta. En el banco estaban Jorge Carranza, Pablo Añaños, Gastón Caprari, Pablo Brandan y Gonzalo Bergessio. El “Loco” Carranza el único sobreviviente, hoy capitán de los Albirrojos. 

Mientras que el equipo que dirigía Alfio Basile tuvo como titulares a Abbondanzieri; Ibarra, Schiavi, “Cata” Díaz, Krupoviesa; Battaglia, Gago, Cardozo, Insúa; “Chelo” Delgado y Palermo. El “sobreviviente” es el otrora lateral derecho, Hugo Benjamín Ibarra, hoy como DT de Boca.

Nombres, tiempos, paso del tiempo, glorias que ya no están. Un estadio emblemático que después de 17 años y medio visitará Instituto. Es otro el presente. Es otra la ilusión.

El elenco que conduce Bovaglio quiere seguir por el buen camino.

La nueva mañana