Elevan a juicio Fernando Albareda, el ex dirigente de DDHH acusado de matar a su madre

El fiscal Juan Pablo Klinger elevó a juicio la causa que investiga a Fernando Albareda por el crimen de su madre, Susana Montoya (74), ocurrido en Córdoba capital a principios de agosto del año pasado. Por ahora no hay fecha para el proceso. Juan Pablo Bastos, abogado representante de Ricardo, hermano de Fernando Albareda, quien fue detenido bajo la sospecha de ser el autor material del crimen de su madre, dialogó con De Una.

“El fiscal hizo una minuciosa investigación”, señaló, luego de agregar que resultó un grado de probabilidad positiva con respecto a que Fernando fue el autor del crimen. El motivo estuvo en “saciar la apetencia económica”, que se suma a un resentimiento personal. Esto se debe que identificaba a su mamá parte responsable de la desaparición de su padre, militar desaparecido durante el golpe de Estado en Argentina. 

“Él tiene una fuerte convicción de que su madre tuvo participación en la entrega de su padre”, explicó. El juicio de lesa humanidad se llevó a cabo en el Tribunal Federal de Córdoba, y se juzgó, aunque no hay certezas sobre la posición ideológica de Fernando.

Detalló que otro móvil del crimen era la codicia. Por detrás también existe un resarcimiento económico como reparación histórica por crímenes de lesa humanidad, que se había dispuesto por el Poder Ejecutivo de la provincia. “Fernando sostenía que solo le correspondía a él”. Su fundamento estaba en que era dirigente de DDHH.

Además, otro de los motivos estaba en la mala relación entre los hermanos. “Nunca fue un vínculo intenso”, dijo el abogado de Ricardo. “Siempre estuvo habitada por un resentimiento por parte de Fernando” debido a que señalaba que en realidad Ricardo era hijo de un amante de Montoya, quien también lo acusó de ser partícipe de la desaparición de su padre.

La Cámara de Acusación rechazó las nulidades que planteó la defensa. También está imputado por falso testimonio. Relató que se debe a que Fernando había realizado una denuncia en 2023, donde manifestó que fue amenazado de muerte por fuerzas policiales. “Fue diseñado y elaborado por él. En su momento se le tomó declaración y se corroboró la falsedad”. Allí aun no era imputado y no gozaba del derecho constitucional de abtenerse a declarar o hasta mentir, si así lo determinara la estrategia defensiva.

El asesinato de Montoya sucedió el 1° de agosto de 2024 en barrio Ampliación Poeta Lugones. Desde un primer momento, el hijo de la víctima intentó desligarse del caso apuntando a una patota parapolicial.

Con el correr de los días la situación de Fernando Albareda se complicó y poco después se convirtió en el único sospechoso. Finalmente, el 8 de agosto quedó detenido en la cárcel de Bouwer, donde permanece alojado desde aquel momento.

La elevación a juicio aún no se encuentra firme. Hay un transcurso de tiempo, previsto por la ley procesual, para que la defensa técnica pueda impugnar este pronunciamiento de la fiscalía. El plazo que tiene para actuar la defensa, si así lo dispone, son de 7 días. De no mediar oposición, el juicio se llevaría a cabo a principios del año que viene.

DE UNA